El deporte tocó su pitazo final en las comunidades waraos
Canchasdeportivas deterioradas, sin implementos, ni políticas de esparcimiento lucenlas comunidades waraos del bajo Delta. El deporte perdió su partida contra elocio en las 320 comunidades indígenas del estado.
Lapoblación warao de las comunidades tradicionalmente deportivas, pierde terrenoen el desarrollo de la educación física ante la falta de políticas recreativasdel Estado venezolano en Delta Amacuro.
LaConstitución de la República Bolivariana de Venezuela establece en su artículo111 lo siguiente: “El Estad garantizará la atención integral de los y lasdeportistas sin discriminación alguna, así como el apoyo al deporte de altacompetencia y la evaluación y regulación de las entidades deportivas”.
En sumejor momento, comunidades como Araguaimujo, San Francisco de Guayo,Nabasanuka, Bonoina, Araguabisi, Winikina entre otras, fueron clasificadas comopotencias deportivas en fútbol de campo, de salón, voleibol y atletismo , segúnseñala Arévalo Avila, atleta y dirigente deportivo en la comunidad de Bonoina.
De igualforma, reconocidos entrenadores deltanos como Ricardo Celis y Freddy Padilla,quienes son preparadores de fútbol de campo y de voleibol respectivamente, hanseñalado su reconocimiento al talento nato de los jóvenes waraos en todas lasdisciplinas deportivas.
“Eldeporte está completamente abandonado en las comunidades waraos, no haymateriales deportivos, balones, mallas ni mucho menos la asistencia técnica, eldeporte está por el piso” afirma Avila.
Un jovenwarao que prefirió reservar su identidad, señaló que los jóvenes practican conpelota de anime y boya de tren, ante la falta de balón, testimonio quedemuestra la decadencia del deporte en las comunidades waraos.
De estaforma, la normativa con rango constitucional del artículo 111 que buscar garantizarel desarrollo del aprendizaje de las actividades recreativas y políticas de Estadoen prevención del ocio, las drogas, el alcohol y los malos hábitos tocó supitazo final.